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Primeras
Jornadas de Esquizoanalisis - 2004 - Coord.
Stella Maris Angel Villegas
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| Carta
de presentación |
Redactora
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Historia |
Suscripción
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Máquina Expositora Real Ensayistas deleuzianos
Preludio La célula en sí misma por Diego Pereira *
«Es la diferencia en
la intensidad, no la contradictoriedad en la cualidad, la que constituye
el ser «de lo» sensible. La contradictoriedad cualitativa
no es sino la reflexión de lo intenso, reflexión que lo
traiciona explicándolo en la extensión». Gilles Deleuze
Ciencia y Arte El deseo de la ciencia, es hacer de la naturaleza, arte: pintarla, esculpirla, leerla, arrancar de su obra escalas y acordes, que penetren en la caótica diversidad de nuestras experiencias sensoriales. Cuando hablamos de verdades en ciencia, nos referimos a constructos hechos con pedacitos de realidad, pizcas de atención y montones de imaginación: solo en el ámbito académico existen los estados de la materia, los estadíos del desarrollo y las jerarquías de organización; solo de manera artística la vida posee un carácter cuantitativo; solo con un fin representativo la evolución es arborescente y gradual. Por eso la vida es inmediatamente ciencia pura, política y social: pensada a partir de estructuras, sistemas, organismos, jerarquías, leyes y complejidad, lo que llamamos vida, es tan solo nuestro estilo más elemental de producir lo que llamamos realidad. Resulta bello decir que la vida es dios, materia-energía, información; pero las palabras transducen actos que reflejan ecos viscosos, automatismos replegados, relaciones dobles del proceder binario, un sí o un no que se excluyen mútuamente cual lámparas iguales: ya encendidas, ya apagadas, se perpetúan bajo un orden cerrado, siempre localizado, lamentablemente corto, instantáneo, plano... Ahora la vida es una transacción empresarial, en que cada una de las partes recurre al arte matemático como mediador estadístico y a la producción lógica para extrapolar sus deseos prescindentes, insuficientes, soporíferos a todas las disciplinas por igual. Desde esta perspectiva, los conceptos, leyes y principios, son definiciones colectivas de la función intelectual, semejanzas y equivalencias particulares, intercambiables y sustituibles de referencia general. Sin embargo, nada ha cambiado. La generalidad abarca todo pero no produce nada: allí todo entra pero nada sale. No demeritamos el valor y distinción de los trabajos que desde la homología, la analogía y la representación han quitado un velo a los más profundos interrogantes de la ciencia; lo que queremos es crear movimientos singulares, ir más allá de la mediación, conducir la experimentación hacia un verdadero simulacro en que los acontecimientos medioambientales dejen de ser ruido para el investigador. La necesidad es obvia —desde la perspectiva de la representación, la célula es actriz y escenario, obra y teatro de la vida; pero también se erige como expresión mediata, mecanista y teleológica del genoma— y el desenlace conveniente —a partir de esta ruptura, emerge una célula diferente, transformada, convertida en un vacío absorbente ubicuamente adornado, en un delirio errante modalmente desplegado en el organismo que constituye, en el módulo que la envuelve— asistiendo el neonacimiento de una téchne. La Célula en Movimiento:
¡La Célula Vive!.
(extracto del libro Células Fundamentales -Fuga- Diferenciación, Potencia y Especialización pag 17-19 en impresión)
* Diego Pereira. Bogotá. Colombia. Médico genetista.
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